martes, 21 de junio de 2011



Todos disfrutamos de estos meses estivales. El Sol, los días largos, las vacaciones. Pero el verano trae también días de mucho calor.

Cada año el intenso calor pone en riesgo a mucha gente porque afecta su sistema de control de temperatura. En condiciones normales, el cuerpo se enfría con el sudor, pero en algunas condiciones este mecanismo de defensa no es suficiente.

Son varios los factores ambientales que afectan a la capacidad del cuerpo para enfriarse cuando hace mucho calor. Así, cuando la humedad es elevada impide que el sudor se evapore rápidamente. Además, si la temperatura se mantiene elevada de manera constante durante un periodo de tiempo prolongado, el mecanismo de la sudoración termina fallando, poniendo en riesgo la salud de la persona, y haciendo que se manifiesten los trastornos debidos al calor ( insolación, golpe de calor, etc )

Pero también influyen factores de tipo personal (sobre los que a diferencia de los anteriores, sí que podemos incidir para combatir el calor), como son: la edad (población anciana y niños pequeños), determinadas enfermedades como: las enfermedades del corazón, una mala circulación, las enfermedades respiratorias, las enfermedades mentales (demencias, Parkinson), enfermedades crónicas (como la diabetes), la obesidad, y el uso de medicamentos o alcohol.

Cruz Roja ha firmado con la secretaria de Estado de Servicios Sociales, Familias y Discapacidad, un convenio para prevenir los efectos de la ola de calor entre la población más vulnerable como son los mayores y los niños. Como medida preventiva, Cruz Roja se ha preparado por si el calor extremo de años anteriores se repite.

Los datos que se utilizan para calcular un índice de calor extremo son: la temperatura, el grado de humedad y el tiempo de duración de una temperatura alta sin mínimas diferenciadas durante varios días. Los grados de temperatura considerados como excesivos son diferentes para cada zona del territorio español.

El Acuerdo ha sido suscrito por el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, a través del Instituto de Migraciones y Servicios Sociales (IMSERSO), Cruz Roja, Caritas España y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP).